Los anti-sistema, los anarquistas, los anti-existencia.

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Todo está formado por sistemas, todo lo que nos rodea, tanto a nivel atómico, como a niveles superiores e inferiores, todo está en circulación, conexión y movimiento. Nuestro propio cuerpo tiene varios sistemas interconectados y que dan lugar a la vida: Sistema respiratorio, sistema digestivo, sistema cardio-vascular, sistema nervioso... y muchos otros que deben preguntarles a sus médicos, porque extenderse en mencionarlos todos es perder el tiempo. Un sistema es la forma en que existe el equilibrio, el reciclaje, un sistema debe tener como mínimo, un ciclo, una entrada y una salida, en nuestro cuerpo, los sistemas se interconectan en la gran red de redes que es nuestro cerebro, el cual también es un sistema, pero el cerebro es un sistema a un nivel superior, porque es un sistema que integra otros sistemas, es como un sistema gubernamental. No se puede pedir que haya vida o existencia, sin sistema de creación, conservación y reciclaje tanto de la materia como de la energía. En cada país, hay un sistema local por regiones, conocidas como municipios o ciudades, los municipios interconectados por un sistema se llaman provincias, las provincias interconectadas se llaman autonomías, las autonomías antes eran países, pero ahora necesitan interconectarse para ser un país, los países se interconectan por medio de aliansas, la diplomacia y organizaciones, sistemas mayores como la ONU.

Para un anti-sistema, solo puede reinar el caos, porque no querer que haya sistema es querer el caos. Una cosa es ser anti-sistema y otra cosa es querer un sistema mejor, un sistema más justo y eficaz contra el mal. Por tanto, si dejas que te llamen anti-sistema, estás dejando que te ofendan, que te llamen monstruo destructivo y portador del caos, el desorden y la catástrofe. Pide un sistema diferente al actual, un sistema tribal, donde cada voz sea oída y respetada. El gobierno basado en tribus es mejor, hoy en día con la tecnología y la alta inteligencia del ser humano, no hay miedo de que comunidades comiencen a matarse mutuamente por un poco de tierra, al contrario, hoy en día nadie quiere dejarse manipular por los líderes, así que las tribus vivirían en armonía y comunicación constante. Miembros de diferentes tribus se casarían, se comunicarían por internet, debatirían pacíficamente.

Por tanto es obvio que los llamados anti-sistema son en verdad gente que está a favor de un nuevo sistema, pero al gobierno del actual sistema capitalista prefiere llamarles anti-sistema, para destruir el futuro de esas protestas y como los que protestan no se ponen de acuerdo en que se basará ese nuevo sistema, es imposible que ganen la batalla contra este sistema y mientras no se pongan de acuerdo, no habrá progreso en la salida de este sistema, ni la entrada al nuevo. En el nuevo sistema, será el pueblo quien directamente establecerá las leyes, cada tribu o clan tendrá sus propias leyes elegidas por el pueblo directamente. De esta forma, los que viven en madrid no tendrán que vivir bajo las mismas leyes que los que viven en barcelona, sino que los que vivan en una ciudad, eligirán las leyes que regirán esa ciudad. Habría paz y cooperación entre las diferentes tribus, la clase dirigente serían los ancianos de esa tribu, habrá un límite de edad para ser de la clase dirigente.
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